Por Jarlen Espinosa
Lo que antes era un lugar de esparcimiento para los residentes de Sabana Perdida, hoy, el Bulevar del referido sector no es ni sombre de lo que fue.
La obra que se realizará durante la gestión del ex-alcalde Daniel Lois con un costo aproximado de RD$5.3 millones de peso, muestra total abandono ante los ojos indiferentes no solo de las recientes autoridades, sino también de las anteriores.
Quienes visitan Sabana Perdida en dirección de sur a norte a través de la Av. Los Restauradores, son recibidos por una estatua de aspecto decadente, la cual fue construida en honor a la poetiza y educadora Salomé Ureña.
Reflejo de pobreza
Detrás de la escultura, un reflejo de pobreza y abandono que robaría credibilidad aquellos que osaran en negar su existencia.
El verde esperanza que emanaban los árboles que bordeaban la obra completa, han ido desapareciendo progresivamente.
Por suerte las lluvias han logrado conservar algunos de esos árboles.
Los asientos en los que antes eran usados para quienes gustaban en recrearse cuando aún era posible, hoy, se encuentran solos, algunos oxidados, otros con piezas menos, pero, ninguno en perfecto estado.
El sucio del que ha sido victima la pintura de color amarillo que arropa los muros del bulevar, no permite encontrar belleza alguna.
Mientras que el referido muro ha ido desplomando por parte, poco a poco.
El descuido del Bulevar de Sabana Perdida, le ha arrebatado la esencia para lo que fue creada la obra.
Quizás es una modo de hacer contraste un el también descuidado puente Gregorio Luperón.
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