Por Jarlen Espinosa.
Santo Domingo Norte. – Con voz suave pero con un mensaje estruendoso, fue la última prédica de la pastora Elisa Muñoz desde la galería de su residencia en el sector de Cuesta Linda, días antes de su trágico asesinato junto a su esposo Joel Díaz, a manos de miembros de la Policía Nacional, en el municipio de Villa Altagracia.
Ella leyó en libro de Gálatas en el capítulo 6, del verso 4 en adelante, haciendo referencia al hecho de que “Dios no puede ser burlado”, en tormo a lo que “el hombre sembrare”.
“No os engañéis, Dios no puede ser burlado; porque todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”, decía parte del texto leído por Elisa.
La pastora habló sobre el tiempo y cómo algunas personas lo desperdiciaban en cosas del mundo, pero, tan pronto se encontraban con alguna enfermedad terminal, accidente o tiempos difíciles buscaban de Dios, que aun que no esta mal según explico, lo ideal era buscarle en todos los tiempos.
“Cuando su tiempo se le está acabando en esta tierra, entonces quieren más tiempo para sembrar para
Dios”, puntualizaba en vida la pastora.
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Sus vecinos le escuchaban en ese momentos, lamentablemente ya no podrán disfrutar de su presencia, agentes policiales optaron por terminar a tiros con su vida y la de su esposo.
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